Sarde, acondicionado en una encantadora casa de tres plantas de la Roma Norte, no esconde su especialidad. Sarde, que en italiano significa “sardina”, pone el foco en el mar y propone una cocina contemporánea basada en el producto más fresco y más de temporada del litoral mexicano. Platos fríos ejecutados con técnicas japonesas como el kampachi o la macarela comparten protagonismo con reinterpretaciones actuales de clásicos familiares como el fish and chips. La atención al detalle se evidencia no sólo en la presentación, también en el marco: cálido, acogedor y con detalles de ladrillo visto y madera. La agradable barra con sus interesantes cócteles es el lugar perfecto para los comensales solitarios.